Costa de Marfil y Portugal se pelean con el gol (0-0)
El rojiblanco Simão entró en el terreno de juego en el minuto 55
Costa de Marfil y Portugal corrieron los riesgos justos y eso se reflejó en un marcador que no se movió. Con Brasil como compañero de viaje en esta primera fase del Mundial, ambas selecciones optaron como primera premisa mantener a cero sus respectivas porterías. Y así sucedió...
Simão inició este Mundial desde el banquillo de los suplentes, ingresando en el terreno de juego en el minuto 55 en el puesto de Danny. Por su parte, el ex rojiblanco Tiago entró minutos después por Deco. Ambos jugadores, como sus compañeros, se toparon con una selección bien ordenada y que a la hora de defender apenas falló.
A los diez minutos Cristiano Ronaldo estampó el balón en un poste tras un gran disparo lejano. Tan esperanzador comienzo no tuvo continuidad y antes del descanso fue Costa de Marfil la que manejó el partido, pero teniendo muchas dificultades para crear peligro. El partido fue más igualado en la segunda parte y bastante más abierto. Hubo más llegadas en ambas áreas, pero tanto Portugal como Costa de Marfil estaban peleados con el gol.
Eriksson, seleccionador de Costa de Marfil, dio entrada al recién operado Drogba en el tramo final del partido en busca de lo que parecía un imposible. El atacante dispuso de una gran ocasión pasado el tiempo reglamentario, pero no llegó a tiempo para rematar bien el balón. Los africanos habían metido la directa en los últimos minutos, pero para entonces Portugal ya había cerrado su área a cal y canto.
Simão inició este Mundial desde el banquillo de los suplentes, ingresando en el terreno de juego en el minuto 55 en el puesto de Danny. Por su parte, el ex rojiblanco Tiago entró minutos después por Deco. Ambos jugadores, como sus compañeros, se toparon con una selección bien ordenada y que a la hora de defender apenas falló.
A los diez minutos Cristiano Ronaldo estampó el balón en un poste tras un gran disparo lejano. Tan esperanzador comienzo no tuvo continuidad y antes del descanso fue Costa de Marfil la que manejó el partido, pero teniendo muchas dificultades para crear peligro. El partido fue más igualado en la segunda parte y bastante más abierto. Hubo más llegadas en ambas áreas, pero tanto Portugal como Costa de Marfil estaban peleados con el gol.
Eriksson, seleccionador de Costa de Marfil, dio entrada al recién operado Drogba en el tramo final del partido en busca de lo que parecía un imposible. El atacante dispuso de una gran ocasión pasado el tiempo reglamentario, pero no llegó a tiempo para rematar bien el balón. Los africanos habían metido la directa en los últimos minutos, pero para entonces Portugal ya había cerrado su área a cal y canto.
