Un partido en el infierno
· El Atlético busca los cuartos de final en Estambul tras el 3-1 de la ida · Arda vuelve a casa · Nadie ganó al Atlético por más de un gol desde que el técnico argentino ocupa el banquillo
Una docena de aficionados del Besiktas no faltó a su tradicional cita en el aeropuerto de Atatürk el pasado martes por la noche para dar su particular bienvenida a los jugadores del Atlético. Con su habitual entusiasmo en los cánticos, jalearon gritos de ánimo sin parar mientras los jugadores rojiblancos se dirigían con tranquilidad a su autobús. El objetivo fundamental de los anfitriones era que los de Simeone leyeran la pancarta que portaban: 'Afortunados vosotros porque veréis el infierno en vida', en referencia al ambiente que espera a los rojiblancos este jueves en el estadio Inönü. El juego psicológico de las 'Aguilas Negras' se trasladaba a Estambul, después de que ya comenzara en la capital de España tras el encuentro que finalizó 3-1 en el Vicente Calderón. Entonces, Carvalhal ya 'vendió' que la empresa era posible con el apoyo de sus seguidores. La escenificación en el aeropuerto no era más que el aperitivo del plan marcado por los turcos para intentar remontar la eliminatoria.
El siguiente paso será la puesta en escena este jueves en el estadio Inönü, un recinto cuya fama supera con creces su aforo de 30.000 personas. Al contrario de lo que ocurre en España, donde se abren las puertas al público entre dos horas y noventa minutos antes del inicio del encuentro, a orillas del Bósforo los aficionados podrán acceder seis o siete horas antes a su localidad. Crear el ambiente adecuado requiere unos preparativos, que los jugadores rojiblancos podrán ver sin salir de su hotel de concentración, situado a unos pocos metros del campo donde se jugarán el pase a los cuartos de final de la UEFA Europa League.
Arda Turan, que ha viajado por primera vez a Estambul desde que viste la rojiblanca, y Falcao ya han 'vacunado' a los suyos contra esa primera impresión. El primero, como ex capitán del Galatasaray, rival histórico del Besiktas, sabe mejor que nadie en la plantilla el tipo de presión que los suyos se encontrarán sobre el campo. Por su parte, el colombiano puede presumir de haberla superado ganando y marcando en este mismo escenario en la pasada edición de la UEFA Europa League con el Oporto.
Estas 'dosis' de realidad parecen importantes a la hora de desmitificar el poder real que ejerce la grada sobre el resultado. Hasta el momento, el Atlético sólo ha perdido uno de los cinco partidos que jugó en territorio turco, pero incluso esa única derrota le sirvió para pasar por lo que los precedentes invitan a ser optimistas. Otra cosa es que la expedición de Simeone no se fíe del potencial de un Besiktas que recupera esta noche la pegada de Almeida para recibir a los rojiblancos. El técnico argentino advirtió que hay 'la mejor concentración y preparación', pero en ningún caso se habló de miedo.
La victoria en Roma frente a la Lazio, la derrota de los turcos en su último compromiso europeo en casa frente al Braga y el 3-1 de la ida son otros datos favorables que deben servir para equilibrar el peso del factor campo. Y es que, desde que está Simeone, nadie ha logrado ganar por más de un gol a los rojiblancos. Ese es, precisamente, el reto que persiguen los turcos.
El técnico argentino, que aún cuenta con las bajas de Tiago, Diego y Silvio, incluyó en la convocatoria a Pizzi y Filipe, ausentes ante el Granada. También viajaron los canteranos Pedro y Saúl, que van afianzando poco a poco su puesto en el primer equipo. Simeone desveló en su última comparecencia de prensa los dos sistemas de juego que podría plantear de inicio, un 4-5-1 o un 4-4-2. La segunda opción, con Adrián y Falcao arriba, es la más repetida por el preparador rojiblanco en lo que va de temporada y 'asegura' gol (entre los dos llevan seis tantos fuera de casa en competición europea), algo importante porque un tanto de los madrileños obligaría a los turcos a buscar cuatro goles, una cifra que se antoja aún más difícil que el 2-0 que les serviría de entrada para obtener el pase.
El Atlético vuelve al infierno, una palabra con ascendencia en la memoria del aficionado colchonero, que no olvida que los rojiblancos ya salieron de otros. Hoy buscarán repetir en el Inönü. En cualquier caso, en esta ocasión, sólo será un partido en el infierno.
El siguiente paso será la puesta en escena este jueves en el estadio Inönü, un recinto cuya fama supera con creces su aforo de 30.000 personas. Al contrario de lo que ocurre en España, donde se abren las puertas al público entre dos horas y noventa minutos antes del inicio del encuentro, a orillas del Bósforo los aficionados podrán acceder seis o siete horas antes a su localidad. Crear el ambiente adecuado requiere unos preparativos, que los jugadores rojiblancos podrán ver sin salir de su hotel de concentración, situado a unos pocos metros del campo donde se jugarán el pase a los cuartos de final de la UEFA Europa League.
Arda Turan, que ha viajado por primera vez a Estambul desde que viste la rojiblanca, y Falcao ya han 'vacunado' a los suyos contra esa primera impresión. El primero, como ex capitán del Galatasaray, rival histórico del Besiktas, sabe mejor que nadie en la plantilla el tipo de presión que los suyos se encontrarán sobre el campo. Por su parte, el colombiano puede presumir de haberla superado ganando y marcando en este mismo escenario en la pasada edición de la UEFA Europa League con el Oporto.
Estas 'dosis' de realidad parecen importantes a la hora de desmitificar el poder real que ejerce la grada sobre el resultado. Hasta el momento, el Atlético sólo ha perdido uno de los cinco partidos que jugó en territorio turco, pero incluso esa única derrota le sirvió para pasar por lo que los precedentes invitan a ser optimistas. Otra cosa es que la expedición de Simeone no se fíe del potencial de un Besiktas que recupera esta noche la pegada de Almeida para recibir a los rojiblancos. El técnico argentino advirtió que hay 'la mejor concentración y preparación', pero en ningún caso se habló de miedo.
La victoria en Roma frente a la Lazio, la derrota de los turcos en su último compromiso europeo en casa frente al Braga y el 3-1 de la ida son otros datos favorables que deben servir para equilibrar el peso del factor campo. Y es que, desde que está Simeone, nadie ha logrado ganar por más de un gol a los rojiblancos. Ese es, precisamente, el reto que persiguen los turcos.
El técnico argentino, que aún cuenta con las bajas de Tiago, Diego y Silvio, incluyó en la convocatoria a Pizzi y Filipe, ausentes ante el Granada. También viajaron los canteranos Pedro y Saúl, que van afianzando poco a poco su puesto en el primer equipo. Simeone desveló en su última comparecencia de prensa los dos sistemas de juego que podría plantear de inicio, un 4-5-1 o un 4-4-2. La segunda opción, con Adrián y Falcao arriba, es la más repetida por el preparador rojiblanco en lo que va de temporada y 'asegura' gol (entre los dos llevan seis tantos fuera de casa en competición europea), algo importante porque un tanto de los madrileños obligaría a los turcos a buscar cuatro goles, una cifra que se antoja aún más difícil que el 2-0 que les serviría de entrada para obtener el pase.
El Atlético vuelve al infierno, una palabra con ascendencia en la memoria del aficionado colchonero, que no olvida que los rojiblancos ya salieron de otros. Hoy buscarán repetir en el Inönü. En cualquier caso, en esta ocasión, sólo será un partido en el infierno.
